Miniaturas de licor |
Las primeras miniaturas de
De unas primeras botellas toscas sin ninguna relación con las botellas grandes, se fue pasando poco a poco a botellas que incluían una reproducción de la etiqueta de la botella grande y que intentaban reproducir su forma, por la toma de conciencia de que la botella en si podía ser un objeto publicitario.
Esta práctica fue surgiendo en la misma época en todos aquellos países con una notable industria de bebidas alcohólicas, ya que en todos tenían el mismo tipo de problemas. En países con menor presencia de estas industrias, el fenómeno de las miniaturas es mucho más reciente, y se ha producido más como consecuencia de su uso comercial, que de su original uso publicitario.
La producción de botellas de miniaturas se desarrolló en los años 50 y 60 cuando se empezaron a usar con fines de consumo, y no meramente publicitarios. Un nuevo formato de consumo había surgido de lo que originariamente era un simple medio de promoción comercial. Desde entonces se pueden encontrar miniaturas en todo tipo de comercios, bares, hoteles, aviones, trenes, etc. y como objeto material que son, las miniaturas son un elemento tan susceptible de colección como cualquier otro.
Así llegamos a un mundo en el que se tienen en cuenta las más variadas características de cada botella:
Y muchas otras características que definen a cada botella.
Poco a poco,