Cincelado |
Cincelado arte que trabaja con
El cincelado se realiza sobre una plancha de metal algo dúctil y no demasiado dura, de algunas décimas de milímetro de espesor, generalmente
Una vez pegada la pieza en el lacre se marca la figura que se ha de cincelar. Existen muchos medios para hacerlo, como calcar un dibujo o dibujar con lápiz sobre el metal, y luego marcar en material con un punzón, buril, o cualquier cosa afilada. Entonces comienza el verdadero trabajo de cincelado. Con un cincel recto o levemente curvo (resercador o uñete según la jerga) según la forma del dibujo se va marcando definitivamente la figura. Los golpes del martillo sobre la cabeza del cincel deben ser seguidos y parejos para producir una línea prolija. De esto resulta un surco del ancho de la punta del cincel y cuya profundidad varía de acuerdo a la fuerza con que fueron dados los golpes, como muestra la parte A de la Figura 1.
Cuando todo el dibujo está marcado se procede a hundir las partes que van hundidas con un cincel de cabeza plana, a la manera de un bajorrelieve (parte B de la Fig.1). De esa manera ya la parte alta se destaca con respecto al resto. En general se vuelve a marcar la pieza varias veces, de acuerdo a la profundidad que se le quiera dar. Finalmente la pieza se despega de la resina. Si lo que se quiere es un bajorrelieve o se está trabajando en una objeto con una forma especial (cuchillo, etc.) sólo queda limpiarla y darle brillo: si se desea un alto relieve, a la pieza se la trata como muestra la Figura 2.
Los trabajos cincelados suelen ser limpiados con ácido al terminar, para que brillen.